Gigantes

Futuros Gigantes

UN ARCO IRIS LLENO DE... BIZCOCHOS OTOÑALES

¡¡Hola papis y mamis!!

La semana pasada fue una semana muy ajetreada. Además de seguir aprendiendo muchas cosas sobre el otoño, teníamos que ir cerrando un poco todo lo aprendido y recapitulando. Y, por otra parte, nos llegó un arsenal de aceitunas que debíamos preparar para aliñarlas a la semana siguiente. ¡Vamos, qué no paramos en ningún momento!

El lunes, cuando llegamos a la Escuela, Alicia nos recordó el día que habíamos asado castañas y las habíamos comido. Estuvimos recordando lo ricas que estaban y lo duras que nos habían quedado. Estuvimos hablando, también, de que en el pueblo no se asan castañas por la calle. Que eso solo lo habrá visto Alicia en Sevilla por las calles. 

Alicia nos dijo que ella había guardado las cáscaras de las castañas que habíamos comido el día que las asamos y nos propuso pegarlas en el dibujo de la castañeda y su bidón que habíamos pintado. Nos pareció muy buena idea y decidimos ir pasando por turnos por el rincón del otoño para llevar a cabo la actividad. Lo hicimos de forma autónoma y Alicia se sorprendió de lo bien que fuimos capaces de llevar esa responsabilidad. Mientras un@s dábamos brochazos de pegamento en el mural, otr@s íbamos pegando las cáscaras. 






Al día siguiente, en la asamblea, nos emocionamos muchísimo al ver que Alicia tenía un cubo  de aceitunas para enseñarnos. Resulta que la semana anterior habíamos hablado durante una comida de lo mucho que nos gustaban las aceitunas y, por esa razón, nos había preparado ésta sorpresa. ¡¡Íbamos a aliñar nuestras propias aceitunas!!

En la asamblea Alicia nos habló de que debido a lo poco que había llovido éste año las aceitunas se habían puesto negras y estaban arrugadas. Y así no servían para ser aliñadas. Nos comentó que solo podíamos aliñar las que fueran de color verde-green. "¡Cómo la calma!" le respondimos. 

Así que, nos pareció muy buena idea salir al patio para organizar nuestra recolecta y clasificar las aceitunas comestibles y las no comestibles.




¡¡Qué pena nos entró cuando lo único que recolectamos fueron cinco o seis aceitunas verdes-green!! ¿Ahora qué íbamos a hacer? ¡No teníamos suficiente!

Menos mal que, como ya sabéis, tenemos unas familias de primera, que siempre están al pie del cañón, y esa tarde, cuando se lo comentamos, se pusieron manos a la obra para buscarnos muchas aceitunas verde-green. Tarea nada fácil porque como ya os hemos dicho, hay muy pocas este año.

Desde aquí agradecemos enormemente el esfuerzo de la mamá de A. que nos encontró el cubito que tanto ansiábamos ¡¡Gracias por hacer que cada día pueda ser un día especial en la Escuela!!

¡¡Qué alegría más grande cuando llegamos a la Escuela y vimos el cubo grande de aceitunas verde-green!! "¡¡Mira Ali, greeeeennnn!!

Ahora, ya solo nos quedaba la ardua tarea de machacarlas....




La verdad es que nos pegamos una peonada curiosa. Y aun así, muchas aceitunas no se rompían. Y nosotr@s venga a machacar...

Al terminar, nuestr@s compañer@s, l@s gigantes 2, nos habían preparado un zumo de naranja para reponer fuerzas. ¡¡Qué maravilloso es tener amig@s tan detallistas!!






El jueves Alicia nos explicó que la tarea de las aceitunas no había acabado -"¿Más?"-. Estamos aprendiendo mucho sobre el esfuerzo que supone realizar algunas tareas. Ahora, sabemos que las aceitunas que comemos se han hecho con mucho esfuerzo.

Pues eso, que todavía nos quedan unos cuantos días de lavar nuestras aceitunas para que se endulcen. Tarea que por cierto, una vez que la hemos realizado, nos hemos dado cuenta de que nos encanta. Es como jugar con agua, pero viéndola caer ¡¡Divertidísimo!!




El jueves también nos dio tiempo a terminar nuestros árboles del otoño para crear un bosque en el rincón de la naturaleza. Ahí también es dónde estamos dejando reposar nuestras aceitunas. 



Y el viernes, para celebrar tanto esfuerzo durante la semana, decidimos darnos un homenaje. Inauguramos nuestro taller de cocina. Para el cuál nos hemos dado cuenta de que necesitaremos unos delantales y unos gorros. ¡¡A ver qué inventamos!!

Alicia nos propuso hacer un bizcocho de calabaza y nueces. Nos comentó que en nuestro rincón de la naturaleza teníamos esos ingredientes y que alimentarse de una manera sostenible es elegir para comer aquellas cosas de las que se tiene en abundancia. Así que cogimos nuestra calabaza y nuestras nueces y nos fuimos al comedor. Allí nos estaba esperando una aventura increíble.

Mientras unos hacían la masa, otr@s exprimían zumos para que fuera más jugoso nuestro bizcocho. Lo pasamos genial, aunque aun tenemos que organizarnos un poco en la cocina porque cada cual se pone a lo suyo y nos olvidamos de lo importante. ¡¡La limpieza!!

Pasaron cosas diverdidísimas. Hasta un huevo nos encontramos dentro de una de las varillas ¿Cómo llegó? ¿Ahhh? jajajajaj



Esperamos que disfrutaseis del bizcocho en casa. Gracias a la mamá de I., que nos ayudó a hornearlo, salió perfecto. Desde aquí, te agradecemos todo el esfuerzo que hiciste para conseguir que el bizcocho estuviera a tiempo. Si es que con familias así aprender es una maravilla. ¡¡Sois geniales!!


Por cierto, ésta es la última entrada del blog de este trimestre ¡¡¡Ohhhh!!! Ahora tenemos que aprender mucho de la navidad y Alicia debe empezar a producir el vídeo de evaluación. Es por esta razón que debemos bajar un poco el ritmo por aquí. De todas formas seguiremos informando de nuestro día a día en instagram, facebook y twitter. Y, por supuesto, cuando volvamos. en el segundo trimestre, tendréis un resumen fotográfico.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nos gustaría conocer vuestras impresiones

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...