UN ARCO IRIS LLENO DE...ROJO

¡¡Hola familias!!

Como cada miércoles de la semana, los bebés adorables os queremos contar y mostrar todo lo que hemos estado haciendo en estos últimos días. Tras la finalización de la fiesta de Halloween y el pequeño proyecto del otoño, estos días hemos decidido comenzar el aprendizaje de los colores. 

De una manera sencilla y divertida podemos dar comienzo a la identificación de diferentes colores. Podemos pensar que somos muy pequeñxs para comenzar el aprendizaje de los colores, pero Elo nos dice que para nada es así , que ya desde que somos muy muy bebés podemos ir identificando diferentes colores y tonalidades.

Sobre los dos meses distinguimos es el color rojo y el verde, a los tres meses el azul y el amarillo; más adelante sobre los cuatro meses podemos distinguir la mayoría de los colores; ya pasados los seis meses la percepción visual se hace mucho más precisa y podemos reconocer una amplia gama de colores y diversos matices de colores. 

 

En esta ocasión, no hemos querido cambiar la teoría sobre la percepción del color y hemos comenzado por el color rojo. 

Nuestra seño nos ha contado que siempre que comienza el aprendizaje de los colores lo relaciona con las emociones. En esta ocasión  el color rojo está relacionado con la ira y la rabia, por ello cada mañana nos cuenta el cuento del libro enfadado. Se trata de un libro que de tanta rabia que siente se pone rojo rojo, y poco a poco y gracias a nuestra atención y cariño se va volviendo de otro color y deja de estar enfadado. 

Estos momentos son especiales, ya que no solo aprendemos el color rojo, también las emociones, entre ellas la empatía, ya que a la vez que nuestra seño nos cuenta el cuento y pone cara de enfado, todxs cambiamos nuestra expresión del rostro, pasando de la ira a la sorpresa e incluso al final la alegría. 

¡¡Si el libro se siente feliz nosotrxs también!!

La alfombra se ha llenado de bloques de madera con los que poder jugar libremente, pero en esta ocasión había una característica común, y es que todas las piezas eran del mismo color, rojo. Elo a medida que avanzábamos en el juego no paraba de decirnos que todos los bloques son de color rojo. Gracias al juego libre con los bloques de madera podemos beneficiarnos del:

     - Desarrollo de la motricidad fina, al manejar diferentes piezas y bloques, favoreciendo la coordinación mano-ojo, el agarre y el equilibrio y fortaleciendo los músculos de las manos y los dedos.

  

       - Desarrollo de habilidades lógico - matemáticas; aprendiendo tamaños, formas y atributos de los bloques. 

   

     - Desarrollo el lenguaje, ya que a la vez que ellxs van jugando libremente nosotros podemos ir verbalizando todo lo que hacen y ello les ayudará a construir su propio vocabulario.

       - Desarrollo de la imaginación y la creatividad. Los bloques son los juguetes que más estimulan la creatividad y la imaginación, ya que representamos nuestras propias ideas con los juguetes y en entorno.

       - Reconocimiento del entorno. El juego interactivo con los bloques ayudará a nuestros pequeñxs a realzar el pensamiento espacial, iniciándose en conceptos como arriba, abajo, al lado, alrededor.....

Los bloques de madera son un juguete fundamental para motivar el desarrollo social y cognitivo, las habilidades motoras gruesas y finas, la coordinación óculo-manual, la identificación de formar y tamaños, a desarrollar la imaginación y la creatividad en la construcción de castillos, torres....jugar libremente o de manera guiada para el desarrollo de aprendizajes presentes y futuros, mientras se divierten jugando juntxs.

Colgar figuras de colores en la pared o del techo es otra de las actividades que nos ha preparado nuestra seño, y es que estas imágenes nos incitan a que al señalarlas, Elo nos  pronuncie  cual es el nombre que identifica a la imagen y a la vez del color que es. De esta manera no solo aprendemos vocabulario sino también los colores básicos. 

Para ello, Elo nos ha colgado del techo globos de color rojo, móviles con imágenes de diferentes objetos también del mismo color y en la pared ha colocado láminas de los cuatro colores básicos, el rojo, amarillo, azul y verde, que nuestro compañero S. no para de señalar para que Elo verbalice el nombre del color.

Llegó el momento de jugar a la caja de permanencia, un material sensorial que incluye un gran aprendizaje. que nos permite entender que cuando un objeto desaparece de nuestra vista no deja de existir, con lo que nos ayuda a superar la ansiedad de separación. Además nos permite trabajar el movimiento y giro de la muñeca, psicomotricidad fina y la coordinación óculo-manual.

Y siempre en cada rincón, pared, suelo de nuestra clase aparece un nuevo juego con el que experimentar nuevos aprendizajes. En esta ocasión en el suelo de nuestra clase ha aparecido un plástico de burbujas con piezas de madera de color rojo en su interior. Al principio no queríamos tocarlo y gateábamos alrededor mirando sorprendidxs y sin querer tocarlo. Poco a poco nuestra curiosidad le ganó la partida al miedo y nos encantó sentir el tacto del plástico y producir sonidos con nuestros dedos queriendo coger las piezas.

Y las actividades de plástica cada día van teniendo más protagonismo y nos sentimos más cómodxs con ellas. Como aún somos muy pequeñxs, a nuestra seño le de un poco de reparo pintar con tempera de colores, ya que aún nos metemos todo en la boca, pues es el sentido que tenemos más desarrollado. Para crearnos pintura consultó a las familias si podíamos tomar todxs yogur natural. Una vez confirmado que no había ningún impedimento nos preparó pintura con yogurt natural y unas gotas de colorante alimenticio de color rojo. Al principio desarrollamos nuestra creatividad con las manos, siempre con un poco de reparo, pues vernos las manos sucias no es de nuestro agrado, pero cuando probamos la pintura acabamos dibujando con nuestras caras y es que Elo...

 

¡¡¡Esta pintura está muy rica!!!

Y hemos llegado al final de la semana del color rojo.

¿Os ha gustado nuestra entrada semanal?

Nosotrxs nos sentimos felices de todo lo que estamos aprendiendo día a día.

¡¡Hasta la semana que viene!!