¡¡Hola papis y mamis!!
Esta semana queremos hablaros de nuestra clase y de cómo poco a poco vamos creando nuestras rutinas. Ya conocéis, por otr@s años o porque herman@s nuestros han venido a la Escuela, la importancia que tiene para nosotr@s el espacio, el tiempo y el uso que hacemos de estos.
Nuestra clase está llena de rincones muy motivantes, como nuestro espacio del arte o el espacio lógico-matemático. Nos gusta acudir a ellos para explorar los materiales que hay. Alicia y Laura nos van comunicando, a cada momento, cuáles son las normas de funcionamiento para poder estar en ellos. Y es que no podemos utilizar el material para romperlo o para tirarlo al suelo. Estas normas las iremos interiorizando con el tiempo y entonces seremos nosotr@s los que nos preocuparemos de quererlas cumplir.
También tenemos un lugar determinado para depositar nuestras botellas de agua y nuestros desayunos. En este espacio hay fotos de nosotr@s para indicarnos dónde se encuentran nuestras pertenencias. Estos casilleros están a nuestra altura, así tenemos autonomía a la hora de satisfacer nuestras necesidades. Este espacio también tiene normas: Las botellas de agua son para beber y las fotos no se despegan que después no sabemos de quién es cada cosa.
La primera semana observamos que teníamos muchos rincones y juguetes a nuestra disposición pero algunos de nosotr@s no estamos acostumbrad@s a ver tantos juguetes juntos y la atención se nos dispersaba. Por eso, Alicia y Laura han decidido acotar el número de rincones de juego libre. Ahora tenemos el de los coches, la casita y el rincón de la informática. Nos han dicho que a medida que vayamos aprendiendo a jugar compartiendo y cuidando los materiales iremos observando que van creciendo el número de rincones disponibles.
Poco a poco vamos haciendo diferentes actividades. El periodo de atención que tenemos es muy pequeño aun y éstas duran poco tiempo. Por eso, Alicia y Laura nos proponen muchas actividades para hacer: que si ahora pintamos, que si después pegamos gomets, que si jugamos con plasti, que si me pongo un plato en la cabeza, que si me lo pongo en el pie, que si ahora es un volante...
A algun@s de nosotr@s nos resultaba un poco más difícil realizar la actividad la semana pasada. Alicia y Laura decían que no pasaba nada ¡¡Es normal que en momentos nos acordemos de nuestros familiares y que no nos apetezca!! Y cómo nuestras emociones han sido respetadas, no hemos tenido ningún problema a la hora de enfrentarnos al cambio de venir a la Escuela a jugar con los amig@s.
Después éramos nosotros sol@s los que nos acercábamos a realizar la actividad ¡¡Es que no podemos con la curiosidad!!
Observaréis, que durante estas semanas, tendremos mucho juego libre. Aunque no lloremos, porque en la Escuela nos sentimos como en casa y aquí venimos a pasárnoslo bien, nosotr@s necesitamos nuestro tiempo para ir aceptando las normas ¿Y qué mejor manera que a través del juego? Así las normas las interiorizamos sin darnos cuenta.
Ahora lo más importante es respetar a nuestr@s amigos, nuestros materiales y compartir. Aprendizajes muy importantes para nuestra vida.
El patio se ha convertido en uno de nuestros grandes aliados. Nos encanta salir al exterior para disfrutar del sol y correr de un lado para otro.
Nos hemos hecho con una tienda de campaña chulísima que nos da mucho juego. Nos gusta entrar, salir, entrar, salir, entrar, salir... y, a veces, descansar dentro.
Esperamos que hayáis disfrutado tanto como nosotr@s nuestra segunda semana de Escuela. Nos encantaría saber cómo os sentís cuando nos dejáis en la Escuela. Podéis compartir con nosotr@s vuestras experiencias escribiéndonos un comentario.
¡¡Hasta la semana que viene!!
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